El Consejero Buch nos emplaza a una reunión con el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia para reactivarlo
Barcelona, 31 de enero de 2019
La APE se ha reunido hoy con el Consejero Miquel Buch, el Secretario General Brauli Duart y el Director General de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos Manel Pardo, para exigir la puesta en marcha del protocolo de detección de casos de pobreza energética a través de las intervenciones de Bomberos de la Generalitat. Este protocolo lleva en el cajón de la Consejería de Interior desde hace casi dos años, cuando la APE, conjuntamente con un colectivo de bomberos, elaboramos una propuesta con un doble objetivo: detectar casos de pobreza energética a través de la intervención de los bomberos, así como cuantificar las víctimas. El motivo principal de la propuesta es que los bomberos en sus intervenciones son «observadores privilegiados», y con unos indicadores muy sencillos pueden detectar si en el hogar donde han intervenido puede haber una situación de pobreza energética. Hasta el momento, Bomberos de la Generalitat, pese a tener indicios de situaciones de pobreza energética, no pueden reflejarlo ni derivarlo a ningún servicio del ayuntamiento porque no hay ningún protocolo que lo prevenga.
Esta propuesta se planteó tanto al cuerpo de Bomberos de Barcelona como al de la Generalitat, y ambas administraciones la aceptaron y se comprometieron a implementarla. En el cuerpo de Bomberos de Barcelona ya hace más de un año que se puso en marcha y ha logrado detectar más de 500 casos de pobreza energética. En el caso de la Generalitat se llegó a desarrollar un vídeo formativo para explicar la importancia del protocolo y se hizo una prueba piloto en cinco parques de Catalunya (L’Hospitalet, Terrassa, Badalona, Girona y Lleida), pero se detuvo a los pocos meses y no se amplió al resto de parques de Catalunya. Además, la implementación de esta prueba piloto fue deficiente porque el número de casos detectados no llegó a la veintena, cifras que chocan con los resultados de Bomberos de Barcelona.
Hoy le hemos planteado al Consejero la importancia de poner en marcha el protocolo y la urgencia de que sea lo antes posible, ya que estamos en un período especialmente crítico para la pobreza energética y sobre todo para los incendios ocasionados por calentarse con métodos que pueden poner en riesgo la seguridad de las familias.
El Consejero ha reconocido que el protocolo solo estuvo en marcha 2 meses y que desde entonces permanece parado. Nos ha transmitido que se compromete a volver a poner en marcha el proceso para poner en marcha este protocolo, pero que para hacerlo es necesaria la coordinación con el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia. Desde la APE sabemos que esta coordinación ya se dio en su momento durante el plan piloto y no entendemos que haya que empezar de cero. La fórmula que ha propuesto el Consejero Buch es emplazarnos a una reunión lo antes posible con el otro Departamento implicado, y los colectivos que impulsamos este protocolo.
En la APE no toleraremos que desde el Gobierno se vayan pasando el balón entre Departamentos mientras hay vidas en juego. Aun así, nuestra labor nos obliga a poner todo de nuestra parte para que este protocolo se ponga en marcha urgentemente, por lo que participaremos de esta reunión que esperamos que tenga lugar con la máxima celeridad. Por este motivo también nos comunicaremos hoy mismo con el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, para asegurarnos de que esta coordinación se hace efectiva y cada uno toma su responsabilidad. Esperamos que ninguno de los actores ponga trabas para la aplicación de esta iniciativa de manera urgente. El colectivo de Bomberos ya ha dejado claro que no tiene ningún sentido que en su tarea puedan detectar estos casos y no se les permita reportarlo.
Los datos de la aplicación de este protocolo en Bomberos de Barcelona nos dicen que se han detectado en un año unos 40 casos mensuales. Con la capacidad del cuerpo de Bomberos de la Generalitat podrían detectarse 160 casos de riesgo de pobreza energética mensualmente, con lo cual, cada día que pasa sin la aplicación de este protocolo perdemos la oportunidad de prevenir incendios y muertes por pobreza energética.